miércoles, 21 de abril de 2010

El PSOE de Huelva y su difícil apuesta a caballo ...perdedor?

No es por ser agorera, pero pienso que esa debe ser la pregunta que se ha debido estar haciendo Mario Jiménez a la hora de decidir la candidata del PSOE al Ayuntamiento de Huelva.

No he hecho más que escribir dos frasees y ya hay varias afirmaciones que argumentar. En primer lugar, el uso de la palabra candidata, que no ha sido casual. Estoy convencida de que desde las filas socialistas onubenses se piensa que sólo una mujer podrá ganar en populismo a Perico. Por eso apostaron, tras los fiascos de Díaz Trillo, por Manuela Parralo. Pasaron el protagonismo después a Petronila Guerrero, se quedó de portavoz en el grupo Elena Tobar y se plantean la reentrada de Cinta Castillo en la política municipal choquera.

Y es que precisamente estas tres mujeres (Petronila, Tobar y Castillo) protagonizan ahora todas las apuestas de los periodistas, socialistas y aficionados a la política de Huelva. Y yo tengo mi propia apuesta: Elena Tobar. La actual portavoz del grupo municipal socialista se ha ganado a pulso un reconocimiento digno a la durísima tarea que le ha caído encima sin comerlo ni beberlo: mantener la oposición del PSOE frente a la mayoría absoluta pepera del consistorio choquero.

Por contra, ni Castillo ni Guerrero deberían ser "quemadas" en la difícil tarea de enfrentarse al hasta ahora imbatible Perico Rodri. Es verdad que el desgaste hace mucho, la crisis y los impagos a los proveedores también, y que todo esto puede pasarle factura a los populares en Huelva. Pero también lo es que hasta ahora no han sabido encontrar a nadie que logre siquiera hacerle algo de pupa electoral al fotógrafo. Desde ningún partido.

La presidenta de la Diputación parecía poder hacerle sombra desde su superpalacio en la céntrica Plaza de las Monjas. Pero a mí la operación Petronila me huele demasiado igual que la de Parralo: señora con muy buena imagen que pasa una legislatura entera haciendo oposición al alcalde desde el trono de la Diputación (ésta como presidenta, la anterior como vice). Y además su figura ya ha sido rentabilizada suficientemente estos años: todas las veces que ha aparecido la Guerrero, por protocolo, junto a Perico, poniendo el contrapunto. Objetivo cumplido.

La ex consejera y ex senadora Cinta Castillo, ya ha mostrado su disposición a enfrentarse a Perico en las urnas. Pero ésto es nada nuevo, como ella misma reconoce. De hecho, ya sonaba su nombre mientras paseaba palmito por la populosa calle Concepción cuando se buscaba un relevo al ex-delegado de Cultura, bastante quemado de sus cuerpo a cuerpo con Pedro Rodríguez. Y se incorporó a la lista de Parralo para auparla en su intento de derrocar a Rodri. Tras el fracaso, se produjo su huida del grupo gracias a una llamada para formar parte del gobierno andaluz como titular de la Consejería de Medio Ambiente. Sería ahora una vuelta, como decimos. Pero aunque ella diga que sí, ¿estará verdaderamente dispuesta a hacerlo? Vaya bajón de escalafón, ¿no?

Por otra parte, Elena Tobar ha sido la que ha estado trabajando este año y medio en el Ayuntamiento. No sólo le ha tocado "bailar con las más fea", es que además lo ha hecho. A lo mejor no con todo el éxito que hubieran querido sus superiores. Pero, ¿se han parado a pensar con los medios con los que ha contado esta pobre mujer durante este tiempo? Si ni siquiera tiene página web actualizada!!! (Véase lo que aún se encuentra hoy por hoy rastreando la red acerca del grupo municipal socialista de Huelva). Es probable que la dirección socialista esperara más de la cabeza de la oposición, pero no pueden dejar de reconocer que llegó allí de pura chiripa tras la marcha de Parralo y que medios ha tenido bien poquitos. Puede ser que esta defensa de la Tobar la haga yo por pura empatía (¿serán cosas del tocayismo?). Pero creo que si le armaran una buena lista, Tobar podría representar más claramente a un PSOE trabajador, de base, aunque fuese desde la oposición, que cualquier otro político venido desde las alturas de los cargos institucionales y dispuesto a bajarse del carro en cuanto tuviera mejor ocasión (es decir, mejor cargo).

Y todo este debate parte de mi premisa de que en el PSOE trabajan en la candidatura municipal sin perder de vista que hasta ahora Pedro Rodríguez no ha sido batido en las urnas. Parten, aunque nunca lo reconocerán, de la hipótesis de que ante el actual alcalde no tienen nada que hacer. Y que aunque en las próximas elecciones -aún queda casi un año- pueden ocurrir muchas cosas, no es probable el vuelco. Y menos si a los populares les acompañara finalmente quien ha sido su militante de base hasta ahora, José Luis Cortés (tal y como comentaba en mi post anterior).

Es probable que me equivocara, pero si yo fuese Mario Jiménez nombraría candidata a la alcaldía de Huelva a Elena Tobar. Sería mi mejor apuesta, aunque fuera a caballo perdedor.