La nueva presidenta autonómica de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, no tiene quien le escriba. De hecho, su Twitter se ha quedado mudo desde el pasado 25 de julio. Y si no escribimos, por supuesto de actualizar la bio ni hablamos. Ésta es la imagen que presenta su perfil el día de la toma de posesión del nuevo cargo. Y conociendo el percal, será probablemente la que permanezca durante algún tiempo aún al buscar en esta red a la usuaria @_susanadiaz (¿nadie le comentó cuando se abrió el perfil que los _gionesbajos_ son lo peor?)
Entendemos que sus recientes ocupaciones como sucesora in pectore la habrán tenido demasiado ocupada como para perder "cero coma treinta" segundos en cualquier trayecto de su vehículo oficial para actualizar su Twitter desde el teléfono. Pero ¿que no lo haya hecho nadie de su equipo? ¿De verdad nadie de comunicación del PSOE se ha dado cuenta de que la presidenta no tiene quien le escriba?... Pues ya va siendo hora ;-)
De todas formas, siendo honestos, poco esperamos de esta nueva presidenta en las redes sociales. Oficialmente, su presencia en Internet se limita a este somero perfil en la red de los 140 caracteres: es lo que tiene llegar a presidenta sin haberse presentado a unas elecciones, que tu equipo de comunicación no tuvo que preocuparse en abrir cuentas por doquier en todas las redes para dejar un profundo y profuso rastro digital del candidato en Internet.
Precisamente por no haber tenido campaña electoral, y porque la precipitación ha jugado bastante en este relevo a la carrera que se ha producido (de nuevo) en la presidencia de la Junta de Andalucía por el acoso de los ERE, hoy sabemos que la presidenta no tiene quien le escriba. Porque analizando su perfil de Twitter se descubre a una consejera fresca, directa, personal, que responde a las menciones (que le interesan) y que se muestra cercana con sus compañeros de partido.
Una vez que anunció su candidatura a las primarias, todo cambió en su Twitter. Salvo el anuncio de hacerlo, y la publicación de la carta en la que pedía el aval a los militantes del partido, ni una sola referencia más; ni siquiera al hecho de que ya fueran innecesarias las elecciones porque era la única que había reunido los avales exigidos. Pero ni a esa cuestión ni a ninguna otra, salvo la referencia al accidente ferroviario en Galicia la víspera de Santiago.
Imaginamos que la urgente preparación para el relevo en el cargo ha precipitado su silencio tuitero, señora presidenta. Imaginamos también que ya habrá asimilado que no seguirá usando esta herramienta como antes. Pero ya que es la única red social (por así decirlo) en la que se deja ver, sería de un gran interés para esta tierra que no perdiera el contacto virtual con la realidad ciudadana que aporta Twitter. Dentro de poco ya tendrá quien le escriba. Pero, por favor, no deje de leer tuits, trendic topics y hashtags, tuits de gente de su partido y de los contrarios: su objetividad se lo agradecerá. Y aunque no siga listas ajenas ni propias, aunque no haga favoritos a sus tuits preferidos, amplíe esa lista de follwing que tiene: sus pies estarán mejor asidos al suelo y, por lo tanto, más cerca de esos ciudadanos que nunca le votaron como presidenta pero que, sin duda, deberán hacerlo algún día.
@elenabarrios
jueves, 5 de septiembre de 2013
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Hola Elena!!! Me ha encantado encontrarte....y leerte. ¿No vas a escribir nada sobre la corriente independentista catalana, la diada y todo el debate que está generando? Me gustaría saber tu opinión. ¡¡Saludos!!
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